Diariodejerez.es
Ayer falleció en el hospital
general de la ciudad, a los 87 años de edad, Manuel Oteo de Lombardini,
conocido experto y perito tasador de antigüedades y de obras de arte que
desarrolló su vida profesional, en Jerez y otras ciudades para numerosas
empresas e instituciones.
Sus amplios conocimientos en este
campo le llevó al primer obispo de Jerez, Rafael Bellido Caro, ha incluirlo en
lo que fue la primera comisión de arte sacro de la diócesis, además de prestar
asesoramiento en esta materia.
También tuvo una importante
trayectoria en el mundo cofrade local habiendo sido un destacado hermano de la
hermandad de Las Angustias donde su opinión y criterios fueron muy respetados y
atendidos. Sus conocimientos cofrades iban más allá de Jerez para ser Sevilla
como una segunda patria. Hombre severo, protocolario y de profundas
convicciones, los más cercanos a él le recuerdan por la firmeza en su labor
profesional donde desplegaba todo su acertado saber.
Manuel Oteo fue un cristiano de
gran devoción mariana que deja viuda, Rosario Barranco, y cuatro hijos: Pedro,
Manuel, Carmen y Dolores.
La académica Fátima Ruiz de
Lassaleta califica este óbito como "una gran perdida para el mundo del
arte de Andalucía y del cofrade de Jerez", trazando el siguiente perfil de
Oteo: "conocedor de todo lo relativo al arte sacro y a la historia de
nuestra ciudad y de la capital hispalense y del arte europeo en general.
Experto en pintura de época; platería y orfebrería; ornamentos, tejidos y paños
sacros; ceremonias y protocolo. Gran amigo de sus amigos y como de la familia
en el caso de mis padres".
Para Ruiz de Lassaleta, Oteo de
Lombardini "fue un hombre renacentista interesado en arquitectura tanto
religiosa como civil. En mobiliario y sus estilos. Un caballero español en su
trato y un señor jerezano en su fondo y formas. Se dedicó con éxito a las
antigüedades, siendo un coleccionista de libros de arte y de objetos preciosos.
Llevó a cabo las testamentarias de las principales casas señoriales y
palaciegas de Jerez, El Puerto, Cádiz y Sevilla durante mas de sesenta años,
cuando trasmitió todos sus conocimientos en esas materias a sus hijos y sus
mejores virtudes. A los que trasmito, en la oportunidad que me brindan, mi más
sentido pésame".